¡Piensalo!

Suicidio, acoso , Internet

¿Has leído en voz alta lo que escribes en internet?

Internet es probablemente el medio más importante que mantiene conectado a la sociedad actualmente. Las interacciones sociales personales son cada día más lejanas, los individuos comienzan a mostrar una tendencia a preferir estar solos con un aparato conectado a internet, que pasar tiempo con personas físicas, se prefiere crear una personalidad ficticia en internet que serla en la vida cotidiana.

Los aparatos electrónicos como computadoras, teléfonos, tablets son instrumentos que se usan como portal a otras dimensiones de información como lo son las redes sociales de internet, tales como Facebook, Instagram, WhatsApp, Tik Tok, entre otras; estas son plataformas que transportan a los individuos a contextos y realidades distintas, donde los comportamientos cambian y parece que se deja liberar los impulso de nuestros pensamientos, sin limitante de una conciencia que debería razonar y concientizar lo que se dice y sus consecuencias. “Se identifica tres grandes maneras en que los jóvenes piensan sobre sus actividades en internet: el «self-focused thinking» (pensamiento centrado en sí mismo; el «moral thinking» (pensamiento moral, preocupado por las consecuencias sobre la gente que conoce) y el «ethical thinking» (pensamiento ético, preocupado por el impacto en personas desconocidas y comunidades más amplias) (James, 2014, p.7)

Imagen ilustrativa. Fuente: Pixabay

Desafortunadamente el pensamiento predominante en el uso de internet actual es el “self-focused thinking”. El individualismo que gobierna la sociedad tiende a que cada día se piense menos en los resultados de nuestras acciones, se actúe con impulsos y arrebatos, e incluso la moralidad se pierde “la moralidad del prójimo implica preocupación por otros conocidos como miembros de la familia, amigos, vecinos y otras relaciones cercanas, este tipo de moralidad puede tomar varias formas, incluida la transmisión de respeto y compasión…” (James, 2014, p.4)

Una lamentable prueba de esto son los recurrentes casos de suicido que han incrementado cada vez más en el mundo según la OMS “más de 3 mil personas se suicidan por día en el mundo, la cifra alcanza el millón anual. En 2017 el suicidio es la 13va causa de muerte mundial, Segunda causa de muerte en el grupo de 15 a 29 años, primera causa de muerte entre los 10 a 24 años de edad. En Estados Unidos es la primera causa de muerte de los 10 a 34 años. En México, es la segunda causa de muerte en mujeres de 15 a 29 años y tercera entre varones de 15 a 29 años.” (Tijuana, 2019)

Sulli, era el nombre artístico de una joven cantante y actriz surcoreana de apenas 25 años de edad que terriblemente el día 14 de octubre del año 2019 decidió quitarse la vida en su departamento, dejando solo una carta donde expresó lo cansada que estaba de recibir tantos ataques y acosos. Todas las investigaciones apuntaron a que el motivo de tal tragedia fue a causa de los innumerables ataques recibidos por comentarios maliciosos en redes sociales.

La joven artista tenía una carrera prominente y ante los medios televisivos se mostraba fuerte, hoy se sabe que esa actitud solo fue una fachada que mantenía la ex idol de K-pop para mostrar rasgos emocionales que realmente no experimentaba, pero que era lo único que la podía mantener en su empleo. “Los movimientos musculares y los cambios corporales se hacen funcionales como casos de emociones solo cuando los categorizamos de este modo, dándoles funciones nuevas como experiencias y percepciones.”(Feldman, 2017). Sulli solo pudo nombrar como tristeza, decepción y desesperación al conjunto de movimientos corporales y experiencias que pasó a causa de los masivos mensajes de odio que la arrobaron por años, a razón de personas sin conciencia ética.

Imagen ilustrativa. Fuente: Pixabay

Los mensajes que recibía Solli en todas sus redes sociales hablaban sobre juicios absurdos hacia su persona, invadiendo su privacidad, la criticaban por ser mujer, tener una pareja sentimental, salir a divertirse con amigos, no usar sostén, ya que para ella era como un accesorio y no se sentía cómoda usándolo cuando estaba fuera de las cámaras, la criticaba por actuar, por cantar, incluso juzgaban su manera de sentarse y caminar. Todos esos comentarios mostraban la falta de moralidad y ética por parte de quienes lo escribían “El pensamiento ético implica considerar el efecto de las acciones de uno en múltiples y distantes partes interesadas y en la integridad de una comunidad más grande.” (James, 2014, p.4)

“La gente que está cognitivamente ocupada es más probable que haga elecciones egoístas, use un lenguaje sexista y emita juicios superficiales en situaciones sociales”. (Kahneman, 2011, p.42), tal vez esta cita que expresa Kahneman pueda mostrar una causa del comportamiento de los acosadores y agresores, pero no es una justificación, al contrario, es una muestra de lo mal que estamos como sociedad. Mensajes como los que orillaron a Solli a su destino no son simples puntos ciegos que se puedan comprender (“Los puntos ciegos son a menudo presentes independientemente de la fuerza de la los valores morales y éticos del individuo y la propia concepción de sí mismo como una buena persona” (James, 2014, p.9)), a nadie se le puede salir por accidente insultar de manera tan cruel a otra persona, por lo contrario se puede juzgar como un relato pesimista, donde se unen personas a atacar la integridad de otra. Acciones como estas son el reflejo de desconectes que sufren las personas más solas y frustradas “los desconectes son bastante conscientes. Se produce un desconecte cuando se considera las dimensiones morales y éticas de una situación, pero luego se destina sumariamente a favor de los intereses en sí mismo” (James, 2014, p.10

Los mensajes que recibía Solli en todas sus redes sociales hablaban sobre juicios absurdos hacia su persona, invadiendo su privacidad, la criticaban por ser mujer, tener una pareja sentimental, salir a divertirse con amigos, no usar sostén, ya que para ella era como un accesorio y no se sentía cómoda usándolo cuando estaba fuera de las cámaras, la criticaban por actuar, por cantar, incluso juzgaban su manera de sentarse y caminar. Todos esos comentarios mostraban la falta de moralidad y ética por parte de quienes lo escribían “El pensamiento ético implica considerar el efecto de las acciones de uno en múltiples y distantes partes interesadas y en la integridad de una comunidad más grande.” (James, 2014, p.4)

Sulli trabajo muy duro desde los 11 años de edad, comenzó su carrera como actriz en el año 2005, para continuar en el 2009 como idol de k-pop, todo el tiempo que trabajo fue duro por la necesidad de cumplir los estándares de entretenimiento surcoreano e internacionales, a pesar de todo se mantuvo firme a sus ideales por defender la libertad de las mujeres y el respeto al cuerpo y decisiones que tome cada persona, pensamientos que fueron seriamente atacados por los internautas. “El suicidio es una realidad empujada en ocasiones por las redes sociales. Estas tienen tal influencia que algunos jóvenes desean estar en línea el mayor tiempo posible y satisfacer estándares poco realistas, crean un vínculo afectuoso a través de likes o seguidores y genera frustración y tensión por no obtener lo que esperan” (Tijuana, 2019)

Muestra de la influencia de los comentarios y su desesperación incomprendida la ex idol de K-pop en su última transmisión en Instagram dijo: «No soy una mala persona, ¿Por qué hablan mal de mí? Díganme una sola cosa que haya hecho para merecer esto». Estas últimas palabras de Sulli son ejemplo de las desventajas de la comunicación virtual y del exceso de importancia que se da a internet por parte de los jóvenes y su dependencia emocional a las plataformas; palabras como las anteriores nos permiten dimensionar la infelicidad en la que debe vivir una víctima a causa la crueldad e inconsciencia de sus acosadores. “Estar atados digitalmente entre sí puede disminuir, si no borrar, el tiempo a solas necesario para desarrollar un sentido de autonomía, un marcador clave de una identidad sana y una condición previa para el pensamiento ético. La constante conectividad puede permitir un acoso implacable y continuo” (James, 2014, p.13)

Nadie atendió esta gran señal de desesperación de la artista y por lo contrario los comentarios continuaron. Nadie miró con pensamiento ético la situación, solo se pensaba que era una situación más que pasaba en internet, las personas desvalorizarón todo, se pensó que era algo pasajero e incluso se opinó que lo que ocurre  en internet no trasciende más allá; a razón de esto Solli  fue invitada a ser conductora del último programa de televisión en el que participará “The Night of Hate Comments”, programa que sólo la lastimó más y eso pareció no importar, no había mejor propaganda que la de una mujer que era “fuerte”, que era atacada constantemente y respondía a sus agresores con “amabilidad y educación”. “Hoy en día, los especialistas en marketing quieren más que nunca datos relacionados con el estado de ánimo, al menos en parte para impulsar la orientación publicitaria automatizada y personalizada.” (Pelly, 2019)

¿Dónde queda nuestra ética cómo audiencia, cómo sociedad, cómo individuo?, los roles que se están asumiendo en internet son realmente perturbadores, perder incluso la moralidad y no pensar ni siquiera en las personas mas cercanas, da testimonio de lo solos que estamos como personas. “…el concepto de Gardner de la ética de los roles implica reflexión sobre la naturaleza de los roles de uno…las responsabilidades asociadas con el contexto más amplio en el que se sitúan dichos roles.” … (James, 2014, p.5)”

Las redes sociales solo nos han mostrado que no solo estamos más solos en cuestiones al alejamiento físico con otras personas, sino que incluso estamos quedándonos solos con nosotros mismo, se está perdiendo los valores y los intereses que nos hacen humanos, cada vez menos interactuamos en relatos optimistas.

Tal vez se acortan distancias y tiempo para conocer a más personas que viven en diferentes contextos, pero esto mismo nos ha llevado a dejar de identificar las líneas de respeto y empatía con los demás. El que no se vea las reacciones y emociones de los que están detrás de la pantalla no significa que ellos no sufran consecuencias de nuestras acciones.

El caso como el de Solli son muestra de la terrible crisis social que enfrentamos, el asumir que estamos solos y tener que liberar nuestras frustraciones contra otros por medio de internet no son más que acciones inmorales, antiéticas y repugnantes que nos llevan a dañar a terceros y a nosotros mismo.

“El contenido que publicamos transmite, ya sea implícita o explícitamente, lo que es aceptable comunicar en público contribuyendo así a las normas” (James, 2014)

¿Realmente está bien comunicarnos para ocasionar la muerte?

Referencias:

  • Feldman, L. (2017). La vida secreta del cerebro. Lectulandia.
  • James, C. (2014). Morality, ethics and digital life. En Disconnected. Youth, new media and the ethics gap. (págs. 1-22). Estados Unidos de Norteamérica: The MIT Press.
  • Tijuana, C. (2019 de noviembre de 2019). VOCETYS. Obtenido de Redes sociales, detonantes que incitan al suicidio de adolescentes y jóvenes: https://www.cetys.mx/noticias/redes-sociales-detonantes-que-incitan-al-suicidio-de-adolescentes-y-jovenes/
  •  Pelly, L. (10 de June de 2019). Big Mood Machine. Recuperado el 01 de junio de 2023, de The Boffler: https://thebaffler.com/latest/big-mood-machine-pelly
  • Kahneman, D. (2011). Pensar rápido, pensar despacio (1st ed.). LeLibros. http://LeLibro.org/
  • Infobae. (2019, October 14). Quién era Sulli, la estrella del K-Pop atormentada por las críticas en redes y los ataques de pánico. Infobae. https://www.infobae.com/america/entretenimiento/2019/10/14/quien-era-sulli-la-estrella-del-k-pop-atormentada-por-las-criticas-en-redes-y-los-ataques-de-panico/
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